Tras una experiencia amarga y dolorosa Jimena Costa decide trasladarse a Santa Brígida, su pueblo natal. Una tranquila localidad que pronto verá alterada la apacible vida de sus habitantes por la desaparición y asesinato de varias jóvenes, dejando a la población inquieta y conmocionada. La investigación de los crímenes nos llevará por una encrucijada de caminos escabrosos e inesperados que confluirán en Jimena. Página a página el mal se irá apoderando del pueblo creando un clima desasosegante y malsano hasta sorprendernos con un final desconcertante que nos sobrecogerá y nos hará reflexionar. Porque en la vida... "Nada es lo que parece".

Mi opinión:
Hace tiempo que leí esta primera novela de la escritora Tere Oteo.
Conocía su maravilloso arte en el micro, pues he leído algunos con los que participado en numerosas antologías, además de su primer libro, "Orbis Verbum", donde incluye una colección de maravillosos microrrelatos, junto con poemas de gran catadura...
Sin embargo, esta su primera novela, "Nada es lo que parece", me ha impresionado sobremanera.
Jimena, la protagonista, llega a su pueblo natal para comenzar una nueva vida. Sin saber cómo ni por qué, se ve inmersa en una serie de crímenes atroces que atemorizan a todo el pueblo. Una investigación se inicia y la trama nos desvela, nos va desvelando, poco a poco sorpresas que se van sucediendo, que van dejando detalles cruciales para el lector, haciéndolo la autora de una manera magistral; enlazando cada capítulo con un nuevo hecho acaecido en el anterior, haciendo que el lector sienta necesidad por comenzar el nuevo.
Podríamos calificarla como novela negra, puesto que hay una investigación muy bien llevada por un grupo de agentes que se desplazan desde la central ante la incompetencia de la policía local. Aunque también la encuadraría dentro del género de suspense, pues la trama así lo atesora, e incluso dentro del género de terror, por hechos que ocurren y que, evidentemente, no voy a desvelar. Para mí, la narrativa de la autora en esta novela es una amalgama entre el suspense de los cuentos de Poe, las investigaciones policiales de las novelas de Agatha Crhistie y el terror de muchas de las novelas de Stephen King.
En “Nada es lo que parece”, en sus poco más de doscientas páginas, la autora no deja lugar para el respiro del lector, con frases cortas y contundentes que hacen que la acción discurra sin descanso por sus líneas, como una cascada de palabras y situaciones que nos llevan a un final inesperado y sorprendente...
He leído reseñas en las que decían -de manera equivocada, a mi entender- que los finales de los capítulos, e incluso de la propia novela, son forzados... Sin embargo, como he dicho, para mí, opiniones equivocadas, pues la trama de la narración así lo requiere. Los artilugios y recursos narrativos como, por ejemplo, descripciones de lugares o de las propias vidas pasadas de los personajes, no harían otra cosa que ralentizar el ritmo narrativo que la autora ha querido imponer de manera espléndida. Es cierto que con esas descripciones y ralentizaciones, la novela se leería de una manera más pausada, menos agobiante para el lector; pero creo que eso era lo que, precisamente, Tere Oteo no quería ofrecer. La intención de la autora, y creo no equivocarme, era llevarnos, llevar al lector, a un final frenético imprescindible para que la narración diera en el clavo. Y Tere Oteo, sin ninguna duda, lo ha conseguido.
Hace poco me enteré de que esta novela no se quedará sola, de que ya se está cociendo la segunda parte, incluso, el proyecto de una tercera; creando una trilogía a la que auguro muchos éxitos. Sin duda, el final de “Nada es lo que parece” a todos los que la leáis os dejará con ganas de esas nuevas partes, como me dejó a mí.
Muchas gracias, Tere, por regalarnos este relato maravilloso que te hace disfrutar durante su lectura, creándote dudas y recelos, cuando terminas su lectura, de que nada es lo que parece…
Comments